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Casitas de jengibre, cupcakes con forma de Papá Noel, una tarta de árbol de Navidad... Hemos elaborado un recopilatorio con los postres más molones para que todos quieran probar tu plato en la cena de Nochebuena.
Todos los años pasa lo mismo, y a nosotras también. Llega la Navidad, se hace reparto de tareas y platos para las diversas cenas y comidas que nos esperan y contigo cuentan solo para comer o, como Phoebe en aquel cumpleaños de Rachel, como mucho, eres la encargada de los vasos. Vale que hasta el momento nuestras habilidades culinarias se habían reducido a un plato de macarrones con tomate (porque los spaghettis eran otro nivel) y a dominar a la perfección el arte de calentar al microondas y congelar el 'batch cooking' de mamá (es decir, los tuppers), lo reconocemos, pero eso no quita que ver a esa hermana barra prima de nuestra edad recibir todo tipo de elogios por su entrante sorpresa o por ese segundo plato alternativo nos dé un poquito de envidia, volviéndonos a colgar la falsa etiqueta de los precocinados. Y nos negamos a que este año nos vuelva a pasar.
Así que, aprovechando que no hay nada más típico de la Navidad que los dulces -quitando las luces, las películas de Navidad y los villancicos- hemos investigado y hemos recopilado el top ten de los mejores postres con los que no hemos podido evitar que se nos hiciera la boca agua. Ve echando un ojo a nuestros consejos sobre cómo cuidarte en Navidad porque si eres tan golosa como nosotras, vas a quererlos probar todos. Además no vas a tener que ser una experta de los fogones para sacar matrícula con ellos porque son tan fáciles que hasta la reina de los congelados podría hacerlos. Se trata de recetas muy sencillas que empiezan con tan sólo tres ingredientes aunque ahora bien, si te quieres marcar un triple con tu madre y llevar un 'trifle' o una tarta, también tenemos unas recetas muy chulas. Como siempre, y siguiendo nuestra línea, hemos buscado los 10 postres más originales y divertidos que seguro que acaparan miradas en la cena de Nochebuena y que seguro que te otorgarán más de un 'like' en redes. Toma nota y prepárate para recibir una ovación por parte de toda la mesa en 3,2,1...
Nada más divertido que unos renos hechos con bizcochitos de chocolate. Como ves, a penas tardarás tres minutos en hacerlos y el resultado es totalmente #Instagramworthy así que, ¿a qué esperas para ponerte manos a la masa?
Ingredientes: 3 bizcochitos cubietos de chocolate tipo Tigretón . 6 mini pretzels. 3 lacasitos rojos. Lápices de decoración de colores.3 palitos de pan. Pasos: Desempaquetamos los bizcochitos y les hacemos dos cortes en uno de los extremos. Atención, es importante hacer un corte en "V" y retirar un poco de bizcocho. Introducimos los pretzels en el corte. Con uno de los lápices de decoración, marcamos donde va a ir l nariz del reno y colocamos el Lacasito encima. Con el lápiz blanco, dibujamos los ojos y con otro de color pintamos el iris. Cortamos el bastoncito de pan a la mitad y lo introducimos por el otro extremo del bizcochito. De esta manera podemos presentarlo en un vaso de tubo como mostramos en el vídeo.
Si te encantan las 'sweet tables' y pretender que sabes cocinar en tu perfil de Instagram, esta receta es perfecta para ti. Estas Navidades dejarás a todos tus seguidores con estos renos de galleta y estos árboles de Navidad hechos con brownie.
1 Brownie de chocolate cuadrado o rectangular.
1 Lápiz decorativo en verde.
Sprinkles multicolores de repostería.
Si el bizcocho es muy grueso, lo dividimos a la mitad. Luego, cortamos cada mitad en dos partes. Dentro de cada parte, cortamos dos triángulos agudos (vamos, que tengan forma de árbol) como se muestra en el vídeo, y los separamos en un plato.
Con el lápiz decorativo, pintamos el bizcocho a modo de serpentina y, a continuación, espolvoreamos los 'sprinkles' sobre el bizcocho.
Cortamos los regalices por la mitad y los introducimos por el lado más ancho del bizcocho para hacer el tronco del árbol.
En estas ocasiones, un DIY (Do It Yourself) puede ser un planazo para pasar un buen rato apartada del frío invernal. Por eso te traemos una receta navideña genial para hacer la mañana de Reyes con los más peques de la casa: ¡unos muñequitos de nieve!
Ingredientes: Unas galletas redondas. Una tableta de chocolate blanco. Unas nubes de golosina. Lápices de decorar. Pasos: Lo primero será derretir el chocolate, que se fundirá mucho mejor si es de repostería. Unos segundos en el microondas son suficientes. Eso sí, ten cuidado de no quemarte al sacar el cuenco (como nos ha pasado a nosotras). Es mejor removerlo hasta que se deshagan todos los trocitos, a riesgo de quemar el chocolate. Luego cortamos a la mitad las nubes, y aprovechando que son pegajosas, las unimos a la galleta. Ahora toca la parte más divertida y para la que puedes llamar a toda la familia: ¡decorar los muñecos! Cada uno puede armarse con un par de lápices decorativos, fáciles de encontrar en tiendas de repostería y grandes supermercados- y lanzarse manos a la obra. Nosotros hemos utilizado lápices en gel, que son un poco más difíciles de manejar, pero el resultado es igual de gracioso.
Con unas simples galletas y unas fresas conseguirás los arbolitos más adorables.
Chocolate fondant verde (Candy Melts).
-Birutas decorativas con forma de estrella.
Derretimos el chocolate fondant y bañamos las fresas en él antes de que se vuelva a endurecer. Derretimos chocolate blanco y cubrimos un lado de la galleta. Pegamos la fresa a la base. Antes de que el chocolate se seque decoramos con bolitas y estrellitas de azúcar.
Prepárate para las casitas más dulces.
Dulces para decorar (caramelos de menta, gominolas...).
Divide tus galletas Graham en cuadrados. Usando el 'frosting' para unirlos, coloca dos cuadrados uno encima del otro para formar la base de tu casa. Con un cuchillo de mantequilla, esparce el glaseado en el borde de otro cuadrado. Únelo en un ángulo de 90 grados con otro cuadrado. Agrega más 'frosting' a los dos bordes exteriores y colócalo sobre los cimientos para crear una casa. ¡Decora las casas como quieras usando tus dulces favoritos!
Las galletas de bastón de caramelo parecen más complicadas de lo que son. Son una galleta de azúcar simple donde la mitad de la masa se tiñe de rojo y luego se retuerce. Así de fácil.
Ingredientes: 400g de harina. Un sobre de levadura química. Una cucharadita de sal. 2 barras de mantequilla temperatura ambiente. 200g de azúcar. Un huevo. 5 mililitros de leche. Una cucharadita de extracto de menta. Colorante alimenticio rojo. Azúcar en polvo. Pasos: En un tazón grande, mezcla la harina, la levadura química y la sal. En otro tazón grande con una batidora de mano, bate la mantequilla y el azúcar hasta que estén cremosos. Agregue el huevo, la leche y el extracto de menta y bate para combinarlo todo. Añade los ingredientes secos y bate hasta que esté completamente incorporado. Retira la mitad de la masa del tazón, forma un disco y envuélvelo con un fil de plástico. Agrega colorante alimenticio rojo a la masa restante y bate para combinar. Forma un disco con la masa roja, cúbrela con una envoltura de plástico y refrigera ambas masas hasta que estén firmes, por lo menos 2 horas y hasta 3 días. Cubre dos bandejas para hornear con papel de cocina. Divide cada círculo en 24 piezas; enrolla cada pieza en una cuerda. Toma una cuerda roja y una blanca y retuerce las dos piezas juntas, doblando la parte superior en un gancho para formar un bastón de caramelo. Colócalos en en una bandeja para hornear y espolvorea con azúcar en polvo. Repite el proceso con la masa restante. Refrigera hasta que esté frío, al menos 30 minutos. Mientras las galletas se enfrían, precalienta el horno a 350 ° F. Hornea las galletas hasta que cuajen y los bordes estén ligeramente dorados, de 10 a 12 minutos. Dejar enfriar por completo antes de servir.
Hornea un homenaje a nuestro gruñón navideño favorito. S los niños les va a encantar.
Una caja de preparado para bizcochos.
Una barra de mantequilla, temperatura ambiente.
Azúcar en polvo.
Una cucharadita de extracto de vainilla.
Dos cucharaditas de nata de montar.
36 M&M's en rojo t verde.
Precalienta el horno a 350 ° y forra dos moldes para cupcakes con 18 papelitos para cupcakes. Prepara la mezcla para pastel de acuerdo siguiendo las instrucciones del paquete y hornea hasta que al insertar un palillo en el centro de los cupcakes salga limpio, de 20 a 25 minutos. Deja que los cupcakes se enfríen por completo.
En un tazón grande con una batidora de mano o en el tazón de una batidora de pie con el accesorio de paleta, bate la mantequilla hasta que quede esponjosa. Agrega el azúcar en polvo y bate hasta que se combinen, luego agrega la vainilla, la nata de montar y la sal y bate hasta que se combinen.
Divida la mezcla en 4 tazones: 1/3 del glaseado en uno (tinte verde), 1/3 del glaseado en otro (tinte rojo) y el resto dividido uniformemente entre los otros dos cuencos (blanco y negro). Coloca en 4 mangas pasteleras separadas.
Usando el glaseado rojo, coloca pequeños puntos en el centro de los M & Ms amarillos. Comienza con una capa gruesa de verde, luego cubra con rojo para formar el sombrero. Agrega blanco donde se unen el rojo y el verde, forrando la parte inferior del sombrero. Cubre con una cucharada de blanco en la parte superior del sombrero. Coloca los dos ojos debajo del sombrero y termina con negro para las cejas.
Estás a punto de convertirte en una experta de las galletas. Estas sencillas galletas en espiral son más que fascinantes, pero también son muy fáciles de hacer.
Un sobre de levadura química.
Dos barras de mantequilla, temperatura ambiente.
200g de azúcar.
4 cucharaditas de extracto de almendras.
En un tazón mediano, mezcla la harina, la levadura química y la sal. En un tazón grande con una batidora de mano (o en el tazón de una batidora de pie, equipada con un accesorio de paleta), bate la mantequilla y el azúcar. Agrega el huevo y bate hasta que se incorpore, luego añade el extracto. Incorporamos los ingredientes secos y batimos hasta que estén combinados. Divide la masa por la mitad, manteniendo la mitad en un tazón para mezclar. Añade colorante rojo para alimentos y mezcla hasta obtener el color deseado. Vierte cada masa en un molde cuadrado. Cúbrelo con una envoltura de plástico y refrigere hasta que esté firme, aproximadamente 30 minutos. Coloca el bizcocho rojo entre dos hojas de papel de horno y enrolle en un molde rectángulo. Repite con el bizcocho blanco. Quita la hoja superior de papel de cocina de cada bizcocho. Coloca el bizcocho rojo encima del bizcocho blanco. Presione suavemente sobre la masa para ayudar a sellar. Retira el papel de pergamino superior y recorta los lados para que coincidan uniformemente. Comenzando por un lado largo, usa el papel de horno inferior para ayudar a enrollar la masa firmemente en un tronco. Rueae el tronco sobre la encimera unas cuantas veces para ayudar a sellar el borde. Envuelve en una envoltura de plástico y refrigere hasta que esté firme, al menos 1 hora y hasta toda la noche. Precalienta el horno a 350 °. Forra dos bandejas para hornear con papel de horno. Coloca las virutas en un plato mediano. Con un cuchillo afilado, corta las galletas y enrolla los bordes en las virutas. Coloca en bandejas para hornear a 2 ”de distancia. Horna hasta que los bordes estén firmes y comiencen a dorarse, 10 minutos.
Cuando Santa haga su lista y la revise dos veces este año, planeamos estar en la parte superior: estos mini bocados de tarta de queso de Santa son la forma más fácil de demostrar lo dulce que eres.
Una tarta de queso simple (casera o comprada en la tienda)
Un cuenco grande de fresas.
Con un cortador de galletas redondo, haz agujeros en el pastel de queso. (Dependiendo del tamaño del pastel de queso, deberías poder obtener de 8 a 12 bocados de pastel de queso). Transfiera la crema batida o Cool Whip a una manga pastelera y coloca una capa encima del pastel de queso. Cubre con la fresa, con las rodajas hacia abajo. Coloca un punto encima de la fresa y sirva.
Este pastel de árbol de Navidad es perfecto para cuando realmente quieres presumir. Es la pieza central más hermosa y todos tus invitados estarán obsesionados con ella.
Una caja de preparado para bizcochos.
Cuatro barras de mantequilla, temperatura ambiente.
600g de azúcar en polvo.
240mil de nata de montar.
Una cucharadita de extracto de vainilla.
Precaliente el horno a 180º. Engrase y forre cinco moldes para tartas redondos. Haz las mezclas de la cala para pasteles de acuerdo con las instrucciones del paquete y divídelas uniformemente entre los moldes para pasteles preparados. Tarda entre 20 a 23 minutos.
Déjalo enfriar durante 15 minutos, luego invierta en una rejilla para enfriar por completo. Envuelve las capas enfriadas en una envoltura de plástico y congela durante al menos 30 minutos y hasta 3 días. Mientras tanto, prepare el glaseado: en un tazón grande con una batidora de mano o en el tazón de una batidora de pie equipada con el accesorio de paleta, bata la mantequilla hasta que no queden grumos. Agrega azúcar en polvo y bata a velocidad baja hasta que quede suave. Incorporamos la crema, la vainilla y la sal y bata hasta que se combinen. Agregue más nata de montar, una cucharada a la vez, según sea necesario, hasta lograr la consistencia deseada. Use un cortador de pastel redondo para cortar un círculo de una capa de bizcocho y colóquelo en un soporte de pastel o plato para servir. Cubra con una fina capa de glaseado. Corte la siguiente capa con un cortador redondo y colóquela encima. Escarcha con una fina capa de glaseado. Repita con un cortad mayor para las siguientes dos capas.
De la quinta capa de bizcocho, corte círculos más pequeños todavía. Apila círculos encima del pastel con glaseado entre cada capa.
Agregue aproximadamente ⅓ del glaseado restante en una manga pastelera con una punta redonda grande y cubra todo el pastel con glaseado. Alise el glaseado con una espátula desplazada y forme un cono. Coloque el pastel en el refrigerador durante 30 minutos para ayudar a fijar el glaseado y hacer que el pastel sea más estable. Divida el glaseado restante en partes iguales entre 3 tazones. Tiñe un tazón de verde claro, el segundo tazón un par de tonos más oscuro y el tercer tazón de verde oscuro.
Para una manga pastelera con una punta de estrella abierta, coloque el verde claro en un lado de la bolsa, luego agregue el tono medio a un segundo lado y el verde oscuro a un tercer lado. Comenzando en la parte inferior del pastel, coloque el glaseado sobre el pastel, separándolo un poco a medida que lo suelte. Gire la bolsa de vez en cuando para que los tonos de verde giren para crear un aspecto más natural. Decora con chispitas para adornos.